Un signo imperceptible que integra a la perfección la hoja al ras de la pared, enfatizando un lujo simple y manteniendo inalterada la linearidad de la estructura gracias al marco «invisible» y a las bisagras escamoteables.
La coplanaridad entre hoja y pared es perfectamente respetada gracias también a la presencia de especiales cierres magnéticos instalados en el lado de cierre. La manija puede presentarse en la versión clásica con roseta o empotrada en la hoja de madera o aluminio.
Los materiales, desde la madera hasta la resina incluyendo los compuestos MDi by Inalco resaltan la esencialidad de la forma integrada ad hoc en las paredes que las incluyen.